En el pasado mes de abril el Puerto de Tarragona obtuvo la autorización provisional con la condición de que habilitara las instalaciones para poder realizar este tipo de exportaciones. Después de unos meses de obras y gestiones administrativas, este mes de septiembre se han obtenido todas las autorizaciones necesarias definitivas.
Foto: www.porttarragona.cat.
Durante todo el verano ya se han ido enviando barcos de terneros y de ovejas a países de Oriente Medio. Estos países son grandes consumidores de carne y por lo tanto el potencial como demandantes de animal vivo es muy alto, puesto que quieren que los animales lleguen vivos para ser sacrificados uno a uno por el rito halal. Según datos del ICEX los principales países no comunitarios importadores de animales vivos procedentes de Cataluña son china, Libia, Corea del Sur, Marruecos, Argelia, Egipto Túnez, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Arabia Saudita, Líbano, Senegal, Liberia, entre otros. Pero las cifras están muy por debajo de las cifras de exportaciones de otras regiones de España, por lo que ahora se puede lograr una gran dinamización del sector en los territorios cercanos al Puerto de Tarragona, como el resto de Cataluña, Aragón, etc.
Esta novedad supondrá que muchas empresas ganaderas cercanas al puerto de Tarragona que por este elevado coste no podían siquiera plantearse la exportación, ahora podrían intentarlo y por lo tanto, empresas que se encontraban en situaciones de dificultad ahora podrían encontrar una salida para poder seguir con su actividad o aumentar sus ingresos. La posibilidad de trasladar a los animales desde un puerto más cercano, supondrá un ahorro importante de los costes de transporte que se había encarecido mucho últimamente por el
Aumento de los gastos en la alimentación, por el aumento de los precios de los cereales y por la subida de precios de los carburantes. Además en los barcos caben muchos más animales, puesto que en un barco pueden llegar a trasladarse miles de cabezas de una sola vez.
Esta novedad es una muestra más que la situación actual del sector de la ganadería en España se encuentra en una situación de cambio puesto que están incrementando las exportaciones no sólo comunitarias sino también las extracomunitarias. Hace unos años las exportaciones extracomunitarias de animal vivo eran esporádicas, hoy día, las exportaciones superan con creces el consumo interno. Por lo que el sector tiene una fuerte dependencia de la exportación y por lo tanto, hay un elevado interés estratégico y comercial en potenciar este sector.
Para ello se han puesto en marcha otras iniciativas que permitan agilizar las necesidades de este sector. Y se debe procurar dotar al máximo a los exportadores de la información y las herramientas necesarias para el proceso de exportación que puede resultar a veces muy complejo. Hay muchas muestras de esta voluntad de incentivar el sector como la creación del CEXGAN por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medioambiente, cuyo objeto es informar a los operadores sobre los requisitos para exportar fuera de la Unión Europea.
Nos podríamos atrever a afirmar que el futuro de este sector de la economía pasa por la internacionalización y especialmente en intentar consolidar la presencia de la carne de origen español en mercados extracomunitarios, especialmente centrándose en países de Oriente Medio y del sur de Asia, que por su tradición musulmana son grandes consumidores de carne de vacuno y ovino y principalmente serían los que demandarían los envíos de animales vivos.