Las actividades logísticas y de transporte conforman un sistema que enlaza la producción con los mercados a los que están dirigidos nuestros productos. En el ámbito internacional la distribución y entrega de forma rápida y efectiva es un factor de competitividad que la empresa no puede olvidar.
Las diferencias de mercados, centros de trabajo, marcos reguladores, operativa aduanera e infraestructuras, además de la elevada fragmentación y costes aparejados, necesitan de un conocimiento profundo y una planificación adecuada de entre otros aspectos la preparación de pedidos (bajo las condiciones pactadas o Incoterms), el embalaje, el contrato de transporte y el modo de transporte elegido (terrestre, ferrocarril, contenedor marítimo, aéreo, multimodal), la recepción de la carga, la figura del operador de transporte