La política ambiental en el transporte marítimo

Fecha publicación: 14 marzo, 2017
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Autor: Josep Pego - Operations Manager Shipping Agency

El uso de combustibles limpios y la reducción de emisiones de gases y partículas contaminantes a la atmósfera en el transporte marítimo es un tema de actualidad y existen ya muchas directrices y normas publicadas para su implantación y control.

El transporte marítimo ha realizado importantes avances en política ambiental, pero todavía está lejos de los estándares del Libro Blanco de Transporte Europeo.

Se han tomado ya medidas enfocadas a reducir las emisiones de gases y partículas contaminantes de los buques, pero todas ellas son complejas de implantar y comportan una inversión muy elevada. El futuro sin duda irá ligado al uso de nuevas energías, pero todavía queda un importante camino por recorrer.

 

La realidad medioambiental del transporte marítimo

El marítimo es el modo de transporte que genera menos dióxido de carbono (CO2) por unidad de transporte (t x km), una sexta parte menos que el transporte por carretera y un tercio por debajo que el ferrocarril.

Sin embargo, la principal desventaja medioambiental del transporte marítimo reside en  las importantes emisiones a la atmósfera  de óxido de azufre (SOx) y óxido de nitrógeno (NOx)el reciclaje de buques al final de su vida útil.

El uso en puertos europeos de combustibles con bajo niveles de azufre evidencia que se han reducido de forma considerable las concentraciones de óxidos de azufre en las zonas portuarias, llegando en algunos casos a una disminución de más del 80% respecto a los niveles del 2008.

Pero todavía están  lejos de los ambiciosos niveles de reducciones de otros  Gases de Efecto Invernadero (GEI) que se contemplan en el Libro Blanco de Transporte Europeo.

 

Medidas para reducir las emisiones

Actualmente existen diferentes medidas enfocadas a reducir las emisiones de gases y partículas contaminantes de los buques, como  la instalación de filtros de lavado o de reducción catalítica, sistemas de recirculación de gases de escape o utilización de gas natural licuado como combustible alternativo.

Pero todas estas medidas implican una alta complejidad operativa y conllevan unos elevados costes de inversión y de operación.

 

¿Y el futuro?

El uso del gas natural licuado se postula como una alternativa real, ya que supone una mejora sustancial en las emisiones de NOx y SOx  y  también, aunque en menor medida, de las de CO2.

Sin embargo, su utilización obligará  a renovar la flota actual  y plantea algunas dudas que deberán resolverse si queremos que las navieras apuesten por ello.

El uso del gas natural licuado se enfrenta a:

  • La necesidad de un mayor espacio de almacenamiento a bordo.
  • La dificultad en la operativa en comparación con el uso de combustibles líquidos.
  • La falta de infraestructuras portuarias de almacenamiento y suministro.
  • La poca regulación que existe al respecto.
  • El precio final del servicio, que algunas fuentes citan que representa un ahorro de en torno al 30% respecto a los carburantes actuales.

Se espera que el uso de este combustible derive en una mejora de la calidad del aire y reducción de la huella de carbono y se avance en el terreno de la competitividad del transporte y la logística.

La utilización de la energía eléctrica es otra opción a tener en cuenta. Pero para ello será necesario dotar de equipamientos  suficientes y mejorar la  red actual en las instalaciones portuarias con el fin de poder suministrarla a los buques durante su estancia en puerto.

Las bonificaciones previstas en las tasas portuarias son sin duda un factor esencial para incentivar el uso de estas energías. Actualmente, los buques propulsados a gas natural y los que durante su estancia en puerto lo utilicen,  así como los que se conecten a la red eléctrica suministrada desde muelle, cuentan con una bonificación del 50% en la tasa del buque contemplada en la Ley de puertos.

 

El marco legal actual

La normativa actual en política ambiental en el trasporte marítimo está regida por:

La Organización Marítima Internacional (OMI)

  • Convenio Marpol, Anexo VI, 1997,  2008, que regula emisiones de gases de combustión para SOx, NOx, PM y VOC, controla la emisión de gases que afectan la capa de ozono y la incineración de basuras a bordo.

La Unión Europea (UE):

  • Directiva Europea 2012/33/EU,  que adopta los límites del convenio Marpol y acota  el uso de combustibles con bajo contenido de azufre en los puertos europeos.

El Gobierno Español:

  • D. 61 y 1027/2006 modificado por el  R.D. 290/2015,  que regula el uso y las especificaciones técnicas  de gasolinas, gasóleos, fuelóleos y gases licuados del petróleo, de determinados biocarburantes y el contenido de azufre de los combustibles para uso marítimo.

 

 

Josep Pego - Operations Manager Shipping Agency

Josep Pego – Operations Manager Shipping Agency

Arola Shipping, S.L.

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