Las compañías navieras regulares construyen cada día barcos más grandes con capacidad para transportar más contenedores de veinte pies (TEU -Twenty Equivalent Unit) y se utilizan también los contenedores especiales para cargas más grandes o pesadas. Pero, a pesar de ello, tienen muchas limitaciones en cuanto a pesos y dimensiones. En Arola contamos con acuerdos para transportar la mercancía en barcos Ro-Ro (Roll On-Roll off) que nos permiten cubrir de forma competitiva las necesidades de envío de la mercancía que supera el peso y las dimensiones estándar.
La estandarización de las mercancías en sus embalajes y pesos permite que actualmente se pueda definir rápidamente cuantos palés, americanos o europeos, caben en cada tipo de contenedor. Además, para los palés o mercancías que sobrepasan los límites de altura o anchura estándar existen los contenedores especiales o Flat Racks y Open Tops. A pesar de intentar cubrir todas las posibilidades con los barcos de celdas o contenedores, nos encontramos también con las piezas especiales o carga suelta (Break Bulk).
Los contenedores especiales tienen muchas limitaciones para la carga pesada y voluminosa y, sobre todo, su envío incrementa el coste del transporte porque su utilización implica perder espacio para otros contenedores. Los buques de celdas, como su nombre indica, organizan la disposición de las mercancías como un lego, al colocar una pieza que sobrepasa las dimensiones estándar se pierde el espacio de otro contenedor. Por lo que el transporte de mercancías sobredimensionadas en este tipo de barcos encarece de forma importante el precio del transporte ya que provoca la disminución del número de contenedores a bordo.
En Arola somos plenamente conscientes de la necesidad de poder ofrecer un transporte para la mercancía que por peso o dimensiones no es posible cargar en contenedores. Por ello, tenemos acuerdos para mover mercancía en barcos Ro-Ro mediante un sistema conocido como MAFI que permite que la mercancía pueda sobrepasar ampliamente las limitaciones de las dimensiones de largo, alto y peso, como varias piezas de maquinaria, camiones, vagones de tren y carga suelta.
Un ejemplo de transporte de este tipo que hemos realizado recientemente ha sido a Jakarta, donde cada caja superaba los 16 metros de largo y tenía un peso total de más de 47 toneladas. Un envío convencional en contenedores habría supuesto un coste cinco veces superior al obtenido, debido a las remociones y espacios que se perdían para poder cargarla de forma segura.
La mercancía de proyecto o carga suelta lleva varios años creciendo en España, debido principalmente a los fabricantes de ferrocarriles, aerogeneradores, materias primas y la industria pesada. En Arola trabajamos para afrontar y dar solución a los nuevos retos y estamos a su disposición para colaborar con sus nuevos proyectos logísticos.
Acompañamos a compañías de todo el mundo en nuestra misión por ofrecerles una movilidad más inteligente, sostenible y segura en el comercio internacional. Y no encontramos una fórmula mejor para hacerlo que estando siempre ahí.
